«Buenas tardes, ¿podría hablar con María? Soy la cabo primero Sonia Bonilla, y actúo como rastreadora en apoyo de la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid. Le voy a hacer una pequeña encuesta que se incluirá en un registro cuya responsabilidad es de la Consejería, ante la que podrá ejercer su derecho a la protección de datos. ¿Puede atenderme un momento? Necesito saber si usted ha tenido síntomas [de la Covid-19] y, si es así, cuándo se iniciaron. ¿Se ha realizado una prueba PCR o ha acudido al médico? A mí me aparece en la base de datos que su PCR ha salido positivo. ¿Lo sabía? Quería confirmar con usted cuáles han sido sus contactos personales más estrechos desde la fecha en la que aparecieron los síntomas…».
La conversación telefónica se desarrolla en un barracón de la Brigada de Infantería Acorazada Guadarrama XII, en la base militar de El Goloso, a las afueras de Madrid. La cabo primero Bonilla es uno de los 10 rastreadores que integran el pelotón de la mañana, cuya actividad se prolonga entre las 9:00 y las 15:00 horas. Durante ese tiempo los miembros del pelotón se dedicarán a obtener información sobre los movimientos y contactos mantenidos en los últimos días por personas que hayan sido previamente diagnosticadas con coronavirus, a partir de los datos suministrados por la Dirección General de Salud Pública de la Comunidad de Madrid, que se actualizan continuamente en una aplicación informática desarrollada por la Consejería de Sanidad.
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