Los resultados desmienten hipótesis anteriores. Además de una primera ola de anticuerpos que dura poco, existe otra de largo plazo. Eso renovó las esperanzas sobre la utilidad de una vacuna para habilitar el fin de la pandemia
Entre las numerosas incógnitas que el nuevo coronavirus presenta a los científicos, una nubla el entendimiento de un factor clave para terminar con la pandemia: los anticuerpos del organismo humano. Algunos estudios habían indicado que duraban pocas semanas, hasta un máximo de 12 meses, lo cual hacía que las reinfecciones representaran la amenaza de una temporada eterna de COVID-19. Sin embargo, un trabajo realizado sobre 30.000 personas en Islandia reveló que no es así: la inmunidad dura como mínimo cuatro meses, lo cual reabre la esperanza sobre la utilidad de una vacuna contra el SARS-CoV-2.
La investigación, realizada por el laboratorio deCODE, de Reikiavik, una filial de la biotecnológica Amgen, de los Estados Unidos, destacó que, a diferencia de las anteriores, que observaron a las personas durante 28 días, esta los siguió durante cuatro meses, y halló que entre uno y dos meses después de la infección, el cuerpo produce una segunda serie de anticuerpos que podrían brindar una protección más duradera.
Lee la noticia completa: Un estudio en Islandia confirmó que los anticuerpos contra la COVID-19 duran al menos cuatro meses – Infobae