Una pomada de ingestión oral a base de yema de huevo con anticuerpos contra la COVID-19 podría evitar el contagio cuando no se lleve la mascarilla, por ejemplo al comer, según un estudio desarrollado por el CSIC que ya ha pasado varios test de eficacia que demuestran que esos anticuerpos permanecen hasta dos horas en la boca.
Se trata de un trabajo desarrollado por el equipo liderado por José Manuel Pérez de Alastra, científico titular del Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) en el Instituto de Productos Naturales y Agrobiología de Tenerife, al que ya ha dado forma gastronómica el cocinero Diego Schattenhofer, de 1973 Taste, en Arona, y que este jueves se ha presentado en una sesión de San Sebastián Gastronómika centrada en los efectos de la pandemia.
Según ha explicado Pérez de Alastra, su equipo lleva varios años trabajando con anticuerpos desarrollados en gallinas. “Cuando la gallina es inmunizada, concentra los anticuerpos en la yema del huevo, un alimento que, al ser natural, se puede administrar por vía oral porque estos anticuerpos no pasan a la sangre”, ha señalado.
Lee la noticia completa: Presentan una “pomada gastronómica” que evitaría el contagio de la COVID-19 al comer | La Razón